Quería decirte

“Quería decirte” (II)

Quería decirte, y con ello creo que me adelantaré a tu pregunta, que para llegar a aceptarme he tenido que peregrinar por mi arquitectura neuronal con insistencia y determinación, y no es para menos: quiero estar y sentirme bien. Imagina un gigantesco centro comercial, un mercado repleto de tiendas en las que se vende confusión, resignación, victimismo, desgana, conformismo, falta de realización personal y yo qué sé cuántas cosas más, a bajo precio. Y de tiempo ni hablamos; ya te dije que no se consigue de la noche a la mañana, más bien todo lo contrario. Se trata de un proceso arduo y lento. Aceptarse es como ser novio de uno mismo en un largo noviazgo y un día, sin saber muy bien cómo, te regalas el “sí quiero” definitivo. Para que no te pille por sorpresa, te diré que en muchas ocasiones he estado perdido, he buscado pero sin saber muy bien qué, otras muchas he tirado la toalla y me he entregado al pensamiento interesado (pensamiento heurístico) y otras, simplemente he bajado los brazos y he sucumbido a la resignación. Hacía mucho tiempo que no me quitaba ojo de encima y no te puedes imaginar las veces que me había reprochado no poder contar conmigo cuando más me necesitaba. Te diré que cuantas más veces me ocurría, mayor era mi frustración, pero al mismo tiempo, más me motivaba. Eso sí, te puedo garantizar que el día que conseguí observarme con calma, sin mirar para otro lado caí en la cuenta de que tal vez había empezado a quererme. Sí, estaba totalmente seguro de ello, había llegado el momento de quererme, de gustarme, de aceptarme con todas mis debilidades, todas mis faltas y mis innumerables imperfecciones. Créeme, noté cómo mis ojos me miraban llenos de humanidad y benevolencia. Sí, cuando te llegue ese momento lo sabrás sin ninguna duda. Ese día te levantarás ligero de equipaje y sabrás que has dejado atrás esa sensación de malestar que habías gestado a lo largo de los años.

Fragmento de la obra inédita, “Quería decirte” de Juan Antonio Prados.

Facebook
Twitter
Quería decirte

“Quería decirte”

….Quería decirte que, después de darme muchas vueltas, después de dedicarle mucho tiempo a mi arquitectura neuronal, creo que por fin he concluido la tarea. Me atrevería a decirte que, hoy por hoy, me he aceptado por completo. Y, sencillamente, me siento bien; te diría que nunca me había sentido mejor. Si me preguntas si ha sido fácil, te diré que no. He llorado, he temblado,…

Leer Más >>
Quería decirte

“Quería decirte” (II)

Quería decirte, y con ello creo que me adelantaré a tu pregunta, que para llegar a aceptarme he tenido que peregrinar por mi arquitectura neuronal con insistencia y determinación, y no es para menos: quiero estar y sentirme bien. Imagina un gigantesco centro comercial, un mercado repleto de tiendas en las que se vende confusión, resignación, victimismo, …

Leer Más >>

“Quería decirte” (III)

Quería decirte, que ya tengo las conclusiones sobre mis últimas sospechas: a las personas que mejor les va en la vida son las que tienen mayor nivel de “coherencia flexible”. Podríamos decir que el grado de bienestar es directamente proporcional a la flexibilidad personal con la que afrontan la vida diaria, sin que por ello tengan que perder su coherencia. Ya puedes empezar a pintar …

Leer Más >>

….Sobre las bondades
de la coherencia Flexible.

Quería decirte que después de afirmar, sin paliativos, que la coherencia flexible nos facilita la adaptación y que ésta nos facilita el camino hacia el bienestar, lo que corresponde es mostrarte la senda para lograrlo, o al menos para que lo intentes, porque sobra decir que estar bien debiera ser nuestro principal objetivo. Quizá te sorprenda, pero la clave está en el nivel de “autocontrol” …

Leer Más >>
Terapias:
Horario:
Pida cita previa: